Podcast: Reproducir en una nueva ventana | Descargar
Suscríbete: Apple Podcasts | Spotify |
1 Tesalonicenses 5:18 NTV. Sean agradecidos en toda circunstancia, pues esta es la voluntad de Dios para ustedes, los que pertenecen a Cristo Jesús.
Terminando este año, solo podemos encontrar que Dios ha sido fiel y que nos ha dado más de lo que podemos imaginar.
Algún día escuché que si nos comparamos hacia abajo, vamos a dar gracias a Dios por todo lo que tenemos y nos ha permitido vivir, pero si nos comparamos hacia arriba, solo vamos a encontrar desdicha, amargura y frustración que nos impide ver claramente todo lo que tenemos.
Por eso mismo, debemos pedirle a Dios que nos abra los ojos para ver claramente lo que somos y lo que de su mano hemos podido realizar y hacer durante todo este año y, finalmente, dar gracias por cada segundo de nuestra existencia. Por eso dice el verso que debemos ser agradecidos en toda circunstancia, porque esa es la voluntad de Dios para nosotros, que aprendamos a ser agradecidos.
Por eso, si pasaste por tiempos de dificultad, debemos agradecer a Dios por ello, pues de otra manera no hubiéramos aprendido a hacer lo que necesitábamos entender, experimentar y aprender; y, como lo dice el verso, eso nos acerca más a la voluntad de Dios y a depender completamente de su perfecta voluntad para nosotros, pero al mismo tiempo nos lleva a entender que muchas veces nuestra voluntad se pierde y nos hace transitar por donde nunca debimos haber pasado.
Al final de este año, qué bueno que podamos hacer memoria de todas las cosas que Dios ha hecho por nosotros y por las personas que amamos y dar gracias minuciosamente por cada una de ellas.
Te puedo invitar, entonces, a que escribas ese listado de acciones de gracias que va desde enero hasta diciembre y no pares de darle gracias a Dios por todo.
Vamos a orar.
Amado Dios, gracias por tu fidelidad, por tu gracia, por tu perdón, por cada desayuno servido que pusiste en mi mesa, aún después de negarte, por cada alegría, por cada frustración, por cada sosiego y por cada momento de caos que pude vivir durante este año. Pues, finalmente, hiciste tú ese descanso, esa paz, esa respuesta y ese alivio que tanto necesitaba y que me levantó en el momento preciso. Te amo, Señor, fuerza y sustento mío, gracias por tu perfecto amor, por tu palabra que me guía y me trae dirección y por tu extravagante gracia que aún no puedo comprender. En el nombre de Jesús, amén.
Tu Tiempo con el Número Uno. 4ª temporada, 30 de diciembre. Agradecidos.
Podcast: Reproducir en una nueva ventana | Descargar
Suscríbete: Apple Podcasts | Spotify | RSS
1 Tesalonicenses 5:18 NTV. Sean agradecidos en toda circunstancia, pues esta es la voluntad de Dios para ustedes, los que pertenecen a Cristo Jesús.
Terminando este año, solo podemos encontrar que Dios ha sido fiel y que nos ha dado más de lo que podemos imaginar.
Algún día escuché que si nos comparamos hacia abajo, vamos a dar gracias a Dios por todo lo que tenemos y nos ha permitido vivir, pero si nos comparamos hacia arriba, solo vamos a encontrar desdicha, amargura y frustración que nos impide ver claramente todo lo que tenemos.
Por eso mismo, debemos pedirle a Dios que nos abra los ojos para ver claramente lo que somos y lo que de su mano hemos podido realizar y hacer durante todo este año y, finalmente, dar gracias por cada segundo de nuestra existencia. Por eso dice el verso que debemos ser agradecidos en toda circunstancia, porque esa es la voluntad de Dios para nosotros, que aprendamos a ser agradecidos.
Por eso, si pasaste por tiempos de dificultad, debemos agradecer a Dios por ello, pues de otra manera no hubiéramos aprendido a hacer lo que necesitábamos entender, experimentar y aprender; y, como lo dice el verso, eso nos acerca más a la voluntad de Dios y a depender completamente de su perfecta voluntad para nosotros, pero al mismo tiempo nos lleva a entender que muchas veces nuestra voluntad se pierde y nos hace transitar por donde nunca debimos haber pasado.
Al final de este año, qué bueno que podamos hacer memoria de todas las cosas que Dios ha hecho por nosotros y por las personas que amamos y dar gracias minuciosamente por cada una de ellas.
Te puedo invitar, entonces, a que escribas ese listado de acciones de gracias que va desde enero hasta diciembre y no pares de darle gracias a Dios por todo.
Vamos a orar.
Amado Dios, gracias por tu fidelidad, por tu gracia, por tu perdón, por cada desayuno servido que pusiste en mi mesa, aún después de negarte, por cada alegría, por cada frustración, por cada sosiego y por cada momento de caos que pude vivir durante este año. Pues, finalmente, hiciste tú ese descanso, esa paz, esa respuesta y ese alivio que tanto necesitaba y que me levantó en el momento preciso. Te amo, Señor, fuerza y sustento mío, gracias por tu perfecto amor, por tu palabra que me guía y me trae dirección y por tu extravagante gracia que aún no puedo comprender. En el nombre de Jesús, amén.
MIguel Montes