Podcast: Reproducir en una nueva ventana | Descargar
Suscríbete: Apple Podcasts | Spotify |
Sofonías 3:17 NVI. «Porque el SEÑOR tu Dios está en medio de ti como guerrero victorioso. Se deleitará en ti con gozo, te renovará con su amor, se alegrará por ti con cantos.»
A veces pensamos que estamos solos con nuestros problemas y con nuestras inseguridades, y que a nadie le importa lo que pase con nosotros, y lo peor de todo, pensamos que solo nosotros los podemos resolver sin la ayuda de nadie. Y la verdad es que, como lo dice el verso de hoy, «el Señor, tu Dios, está en medio de ti como guerrero victorioso» y date cuenta que dice «en medio de ti», y eso significa atravesando nuestro ser, nuestro corazón, en las profundidades de nuestras entrañas, haciendo su tarea y recomponiendo todo aquello que para nosotros parece imposible.
Por eso, el verso dice: (Sofonías 3:17 NVI) «El SEÑOR tu Dios está en medio de ti como guerrero victorioso. Se deleitará en ti con gozo, te renovará con su amor, y se alegrará por ti con cantos». Porque más allá de atravesarnos con su presencia, su gracia, su perdón y su amor, se agrada de nosotros, de nuestro proceso y de las maneras como, aunque sea a tientas, le estemos buscando.
Termina el verso diciendo que Él mismo te renovará con su amor y se alegrará por ti con cantos, y qué dicha saber que nuestro Dios, el creador del cielo y de la tierra y de todo lo que existe y va a existir, te ve, me ve y está en la tarea permanente y sin descanso de renovarnos con su amor, mientras tranquilo susurra la melodía del alfarero que tiene entre sus manos la más preciada obra de su creación, que eres tú.
Querido amigo, a veces puedes pensar que estás solo, pero Dios mismo hoy te recuerda que estás entre sus manos, siendo moldeado y perfeccionado por Él, para preparar nuestro camino a la eternidad.
Vamos a orar.
Gracias, Dios, por restaurarme y moldear mi vida a tu perfecta voluntad. Hoy me rindo a ti y te pido perdón. Cámbiame, renuévame y hazme dócil entre tus manos, de tal manera que pueda aprender y experimentar el molde de tu perfecto amor. En el nombre de Jesús, amén.
Tu Tiempo con el Número Uno. 5ª temporada, 26 de febrero. Todo el tiempo lo hace.
Podcast: Reproducir en una nueva ventana | Descargar
Suscríbete: Apple Podcasts | Spotify | RSS
Sofonías 3:17 NVI. «Porque el SEÑOR tu Dios está en medio de ti como guerrero victorioso. Se deleitará en ti con gozo, te renovará con su amor, se alegrará por ti con cantos.»
A veces pensamos que estamos solos con nuestros problemas y con nuestras inseguridades, y que a nadie le importa lo que pase con nosotros, y lo peor de todo, pensamos que solo nosotros los podemos resolver sin la ayuda de nadie. Y la verdad es que, como lo dice el verso de hoy, «el Señor, tu Dios, está en medio de ti como guerrero victorioso» y date cuenta que dice «en medio de ti», y eso significa atravesando nuestro ser, nuestro corazón, en las profundidades de nuestras entrañas, haciendo su tarea y recomponiendo todo aquello que para nosotros parece imposible.
Por eso, el verso dice: (Sofonías 3:17 NVI) «El SEÑOR tu Dios está en medio de ti como guerrero victorioso. Se deleitará en ti con gozo, te renovará con su amor, y se alegrará por ti con cantos». Porque más allá de atravesarnos con su presencia, su gracia, su perdón y su amor, se agrada de nosotros, de nuestro proceso y de las maneras como, aunque sea a tientas, le estemos buscando.
Termina el verso diciendo que Él mismo te renovará con su amor y se alegrará por ti con cantos, y qué dicha saber que nuestro Dios, el creador del cielo y de la tierra y de todo lo que existe y va a existir, te ve, me ve y está en la tarea permanente y sin descanso de renovarnos con su amor, mientras tranquilo susurra la melodía del alfarero que tiene entre sus manos la más preciada obra de su creación, que eres tú.
Querido amigo, a veces puedes pensar que estás solo, pero Dios mismo hoy te recuerda que estás entre sus manos, siendo moldeado y perfeccionado por Él, para preparar nuestro camino a la eternidad.
Vamos a orar.
Gracias, Dios, por restaurarme y moldear mi vida a tu perfecta voluntad. Hoy me rindo a ti y te pido perdón. Cámbiame, renuévame y hazme dócil entre tus manos, de tal manera que pueda aprender y experimentar el molde de tu perfecto amor. En el nombre de Jesús, amén.
MIguel Montes